El Domingo 17, este diario publicó un artículo titulado, espectacularmente, “Ministerio le Premió la trampa a Interbolsa”, ágilmente retomado en otros medios, en el cual su autor, el prestigioso periodista investigativo Alberto Donadio, argumenta que, al no excluir a Interbolsa como miembro del grupo de entidades aceptadas como creadoras del mercado de deuda pública en 2003, se habrían premiado trampas que, al cabo, explican su derrumbe 10 años después.
Antes de exponer las cinco principales razones por las cuales el argumento no solamente es falso, sino que linda con el absurdo, alguito de contexto. Colombia tomó la decisión, en parte a nivel constitucional, de desarrollar un mercado de deuda pública sustituyendo así las prácticas arcaicas mediante las cuales el Estado se financiaba hasta bien entrados los años noventa del siglo pasado, por un esquema más alineado con la modernidad fiscal.
El mercado de deuda pública, hoy en día constituye, de muy lejos, el componente mas importante del mercado de capitales, y su creación implicaba muchos desafíos, entre los cuales se destaca una pregunta sencillal: ¿Como hacemos, operativamente, para recibir la plata que necesitamos que nos presten?. La decisión que se tomó fue muy atinada: se forma un grupo muy selecto de entidades y se subastan TES solamente entre sus miembros. Estos “creadores de mercado” como se les vino a llamar, reciben, paralelamente un mandato de distribuirlos entre los miles o millones de personas y entidades que los necesitan. Para ser seleccionado creador de mercado es necesario, entre otras muchas cosas, tener calificación AAA, tener un patrimonio alto, contar con acceso al sistema transaccional del Banco de la República y, desde 2003 también, a sus ventanillas de liquidez y demostrar agilidad y eficiencia en la distribución de los títulos.
El esquema de creadores de mercado ha funcionado a la perfección durante la década larga que lleva de vida y sin lugar a dudas es una de las razones por las cuales los TES gozan de la confianza absoluta de inversionistas nacionales e internacionales.
Ahora si, a lo que vinimos. Primero, me gustaría mucho saber qué hubieran opinado los accionistas de Interbolsa en su momento, sobre la afirmación de Donadio de que yo los premié en 2003. Al contrario, tras recibir un informe de la entonces Supervalores sobre algunos incidentes que databan de 1999, apoyé con convicción plena la decisión --que carecía y creo que aún carece de antecedentes-- de cerrar la empresa por tres días, además de clavarles una multa. Hasta el mismo Donadio asi lo reconoce en una mención difusa al final de su informe investigativo.
Segundo, el propósito de una sanción es castigar para que el sancionado mejore su desempeño. La recomendación de Donadio de sustituir la figura de la sanción --que es común ocurrencia aquí y en Cafarnaúm-- por la del cierre definitivo, además de ser completamente ilegal, fácilmente nos dejaría sin sistema financiero. Lo cierto es que como creador de mercado, Interbolsa no volvió a ser sancionada jamás. Antes de que alguna mente retorcida plantee la hipótesis de que eso se explica porque nos tenían sobornados a todos los ministros y supervisores, quiero invitar a Donadio a que nos muestre una actuación concreta efectuada por Interbolsa que constituya una violación de sus compromisos como creador del mercado de deuda pública. Y que por favor no incluya aquellos actos por los cuales recibió la sanción más fuerte de la historia del mercado de capitales colombiano.
Tercero, contrario a las insinuaciones del sagaz autor, lo cierto es que entre las actividades de Interbolsa como creador de mercado y los hechos que llevaron a su quiebra –relacionados con la... <<<<<< N.B from Jumbotweet: auto-truncated at 4K characters on index page - Click here or on the "view" link to see entire jumbotweet! http://www.jumbotweet.com/ltweets/view/12465
El Domingo 17, este diario publicó un artículo titulado, espectacularmente, “Ministerio le Premió la trampa a Interbolsa”, ágilmente retomado en otros medios, en el cual su autor, el prestigioso periodista investigativo Alberto Donadio, argumenta que, al no excluir a Interbolsa como miembro del grupo de entidades aceptadas como creadoras del mercado de deuda pública en 2003, se habrían premiado trampas que, al cabo, explican su derrumbe 10 años después.
Antes de exponer las cinco principales razones por las cuales el argumento no solamente es falso, sino que linda con el absurdo, alguito de contexto. Colombia tomó la decisión, en parte a nivel constitucional, de desarrollar un mercado de deuda pública sustituyendo así las prácticas arcaicas mediante las cuales el Estado se financiaba hasta bien entrados los años noventa del siglo pasado, por un esquema más alineado con la modernidad fiscal.
El mercado de deuda pública, hoy en día constituye, de muy lejos, el componente mas importante del mercado de capitales, y su creación implicaba muchos desafíos, entre los cuales se destaca una pregunta sencillal: ¿Como hacemos, operativamente, para recibir la plata que necesitamos que nos presten?. La decisión que se tomó fue muy atinada: se forma un grupo muy selecto de entidades y se subastan TES solamente entre sus miembros. Estos “creadores de mercado” como se les vino a llamar, reciben, paralelamente un mandato de distribuirlos entre los miles o millones de personas y entidades que los necesitan. Para ser seleccionado creador de mercado es necesario, entre otras muchas cosas, tener calificación AAA, tener un patrimonio alto, contar con acceso al sistema transaccional del Banco de la República y, desde 2003 también, a sus ventanillas de liquidez y demostrar agilidad y eficiencia en la distribución de los títulos.
El esquema de creadores de mercado ha funcionado a la perfección durante la década larga que lleva de vida y sin lugar a dudas es una de las razones por las cuales los TES gozan de la confianza absoluta de inversionistas nacionales e internacionales.
Ahora si, a lo que vinimos. Primero, me gustaría mucho saber qué hubieran opinado los accionistas de Interbolsa en su momento, sobre la afirmación de Donadio de que yo los premié en 2003. Al contrario, tras recibir un informe de la entonces Supervalores sobre algunos incidentes que databan de 1999, apoyé con convicción plena la decisión --que carecía y creo que aún carece de antecedentes-- de cerrar la empresa por tres días, además de clavarles una multa. Hasta el mismo Donadio asi lo reconoce en una mención difusa al final de su informe investigativo.
Segundo, el propósito de una sanción es castigar para que el sancionado mejore su desempeño. La recomendación de Donadio de sustituir la figura de la sanción --que es común ocurrencia aquí y en Cafarnaúm-- por la del cierre definitivo, además de ser completamente ilegal, fácilmente nos dejaría sin sistema financiero. Lo cierto es que como creador de mercado, Interbolsa no volvió a ser sancionada jamás. Antes de que alguna mente retorcida plantee la hipótesis de que eso se explica porque nos tenían sobornados a todos los ministros y supervisores, quiero invitar a Donadio a que nos muestre una actuación concreta efectuada por Interbolsa que constituya una violación de sus compromisos como creador del mercado de deuda pública. Y que por favor no incluya aquellos actos por los cuales recibió la sanción más fuerte de la historia del mercado de capitales colombiano.
Tercero, contrario a las insinuaciones del sagaz autor, lo cierto es que entre las actividades de Interbolsa como creador de mercado y los hechos que llevaron a su quiebra –relacionados con la iliquidez de acciones con las cuales... <<<<<< N.B from Jumbotweet: auto-truncated at 4K characters on index page - Click here or on the "view" link to see entire jumbotweet! http://www.jumbotweet.com/ltweets/view/12464